jueves, septiembre 20, 2007

De caras, de pelos, y de abuelas

Andaba servidora esta mañana desayunando, con mi “según dice todo el mundo últimamente” cara de malaostia", (¿Pueden todos estar equivocados?, cualquiera sabe) cuando se me ha acercado una agueleta, yo para eso de las edades no suelo acertar ni una, pero yo le he calculado entre ochenta y mmm.....más o menos cien años...y mira por donde, me ha hecho pensar un rato, vale lo reconozco, poco rato.

La situación es la siguiente.

Yo, sentada en una silla de una cafetería, solita por qué hoy no me apetecía desayunar ni conmigo misma, y si ni yo me aguanto.....
Mirando por la ventana y pegándole bocaos a mi solitaria tostadita integral, cuando de repente noto un tirón de pelo, pero no un tironcillo cualquiera nooo, cuando me vuelvo con mi cara de ¿eh? ¿Quien mesta tirando del pelo? (mi mare dice que tengo una cara para cosa, u sea, que debía de tener esa) me encuentro a esa señora pegada a mi cara, con una mano sujetaba una bolsa de la farmacia y la otra la estaba pasando por mi cabeza, ay el lindo gatito.
¿Pero que hace señora? –le digo yo. Y ella responde. –Aysn hija, es que en cuantito te visto el pelo, he pensao, -MiraMaria igualito quel que tu tenias y no me podio resistir y me dicho a mi misma -tocaseloMaria tocaselo.
Creo que se me cambio la cara, y ahora tenia la de “joder, cuando hay levante salen todos los locos en mi busca.”

La señora se ha sentado a mi lao, y no ha valido de nada que le dijera que la silla estaba ocupada, ni que estaba esperando a mi padre, ni a mi jefe, ni al Ministro del aire, ella se ha hecho la sorda, se ha sentado a mi verita y ha empezado a ponerse cómoda.
Vuelvo a cambiar de cara, supongo que me salió la de ¡¡¡ Otia, un espectáculo de magia¡¡¡¡
¿No dije antes que llevaba una bolsa de la farmacia? Vale, pues me equivoqué, aparte de eso, empezaron a salir paquetes, bolsas de todos los colores y tamaños y por último un bolso grande. Y todo lo colocó en lo alto de la mesa, por que en el suelo es cosa de guarras, me dijo la Doña, mientras recogia mi bolso del suelo y lo colgaba en el respaldo de la silla.
Y ha empezado a contarme su vida, la de su marido, la de vecina, y por último la de su hija, quee por finn ha tenido descendencia después de diez años de intento, y ya tiene una nieta, mááááás mona ella, y si el bautizo, y si las castañuelas, y si las flores pal pelo, y el convite, y la pelusilla de su cabeza, y ahhhh....
Yo quería colgarme, y poner mi cara de “te miro pero no te veo y te oigo pero no te escucho”, pero ¡Ays¡ hay que reconocer que la señora era lista, y cada vez que notaba que me estaba colgando, me tiraba un tirón de pelo, diciendo que no podía evitar tocarlo. (juer, estaba cogiendo complejo de chica Panten Pro V )

Y después de todo ese rollo, ya os estaréis preguntando ¿y qué tiene que ver con hacerla pensar?
Impacientes sois, joer, ahora lo cuento....

Cuando pedí la cuenta, (si, me ha sacado un menta poleo y un descafeinado sombra de maquina) va y me dice: -¿Sabes qué me da pena?. Y yo la miro y le digo ¿yo?. Y la señora me dice, no mujer, tú no tanto. (¿?)
- Me da pena que, seguramente no voy a llegar a ver cuando mi nieta tenga el pelo largo, asin como yo lo tenia y como tú lo tienes.

No le dije nada, ya que posiblemente sería verdad. Así que me levanté, le di dos besos a la señora y me fui. Ella se quedó removiendo el café. Y yo me quede pensando en que realmente es una putada que el tiempo no te llegue, que tu vida se acabe antes de ver como le crece el pelo a tu nieta.

Ema Yamaguchi, «Bivó», Lápiz de color.

¿Veis por qué no me aguanto?

Shaluditos

5 comentarios:

tia cookie's dijo...

Es lo que tiene la vida, que se desgasta con el uso, pero vale la pena usarla, no es como los estropajos que compras tres a precio de dos, que los guardas en el armario y luego no los encuentras.
Eso forma parte de la magia de esta subespecie nuestra.
como ves yo también estoy como para desayunar con la abuela Panten.
Un beso

Anónimo dijo...

Todo es cuestión de política, lo que pasa es que no tién cojones. Si los políticos hicieran lo que deben, tendríamos días de 30 horas y meses de 45 días, y calculo que podríamos vivir de los ochenta años actuales a unos 130 o así, calculados en años presentes, claro. O sea, que a los 50 años ya tendríamos bisnietos recién nacidos, pero aún nos quedarían nuestros buenos cuarenta años para ver a los bisnietos follar a diestro y siniestro para darnos choznos que nos alegraran nuestra senectud.

Eso para los que fuman, que si no se fuma ya ni te cuento.

Lo que pasa es que no tienen cojones, lo que yo te digo. Les faltan arrestos y asín nos va. Un día un cabrón la meterá en su programa y se forrará de votos, pero que conste que la idea es mía. Quiero las regalías pertinentes.

Anónimo dijo...

Deberias sentirte afortunada de que esa señora, que le quedan dos telediarios, haya perdido contigo un poco (para ella muchisimo) de su escaso tiempo de vida. Y tengo que decirte que te ha salido muy barato ese tiempo: apenas 1,80 euros.

Esa señora te ha advertido de que no somos inmortales y que la vida no es algo que merezca ser desperdiciado con chorradas...si es que, al final, todo es muy simple y se trata de cositas básicas como por ejemplo tocar el pelo que nunca podrás tocar: qué lujo poder hacerlo!.

Si, si, si...ya sabemos todos que no somos inmortales y que la vida se compone, en lo esencial, de asuntos muy básicos. Pero, ¿lo tenemos asumido y lo recordamos en los momentos clave? Sinceramente, hablo por mi y por casi todos aquellos inconscientes vitales...NO, no lo tenemos presente continuamente y normalmente tampoco lo tenemos presente en los momentos clave.

Este tema se podría desarrollar ampliamente pero es poco elegante dar los detalles de algo y, ni sé darlos ni me apetece. Allá cada uno con lo suyo y que cada uno se busque la vida como pueda que a buen entendedor sobran las palabras.

No sé por qué pero se me viene una imagen de la película Platoon, la imagen final de este inmejorable film:
Después de una gran batalla donde pocos supervivientes habian quedado, aparece un soldado encima de una loma rodeado de amigos caidos. El prota, herido de gravedad, lo saluda desde el helicoptero que lo está evacuando. Entonces, ese soldado hace un gesto que podría significar "aqui estoy, vivo". El prota lo entiende perfectamente y debajo de su imagen aparece una cita bíblica: "jovenes, regocijaos en vuestra juventud".

El mejor momento del día es el desayuno, en un bar amigable.

Cyber warrior "el ojo de la blogosfera" dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
chuliMa dijo...

ups...
¿tengo que mirar? juer, me ha subido la sangre a la cabeza
ups...