Chuli y el Sexo

Esta tarde estaba aburrida, y me he puesto a mirar blogs por ahí, resulta que los Post que más comentarios tienen son los que tienen alguna referencia sexual y yo voy a hacer mi pequeña aportación a la comunidad blogera y voy a contar¡¡mi única¡¡ ¡¡Mi inimitable¡¡ ¡¡ Mi irrepetible¡¡ fantasia sexual. Cumplida y realizada ...o sea, que ya dejó de ser una fantasía para convertirse en un recuerdo vergonzoso
Pero que nadie se piense que se va a poner cachond@ con el relatillo, y si alguien lo hace es que está muy enfermo y deberia visitar un psiquiatra urgentemente.
Todo el mundo sabe que me gusta la cruzcampo más que los churros (eooo...que no se os vaya la onda)). Y que cuando me tienen que hacer una radiografia, siempre me pregunta el radiólogo –¿Niña que has comido..que en la radiografia sale un tío gordo con una pluma en el sombrero?. Yo siempre le miro con la misma cara de idiota y le contesto -¿Pos que voy a comer? Lo que me prepara mi madre. (radiólogos atontaos)
Juer...que se me vá la olla del relato polno:
Pues yo siempre había soñado que me hacían el amor 28 veces seguidas en un bar, pero no en uno cualquiera sino en El Gambrinus. En mis sueños estoy con los vaqueros rotos, mi camiseta hippye descoloria, los pelos tiesos y mis botas vaqueras. El camarero cerraba la puerta del bar, y hacia como el que se olvidaba que yo estaba. (si..si.. lo hacia con intención obscena)
El camarero de mis sueños era un cubano morenote, con una melena de pelo negro que le llegaba a la mitad de la espalda. Media 198 por lo menos, y espaldas de camionero (me vuelven loca a mi los camioneros...pol dio). Él cerraba el bar se acercaba lentamente moviendo eeese durito culo cubano, y me susurraba en el oido.
-¿Quieles otra celvesa mi amolll?. (Vaya pregunta más tonta)
Después de bebernos dos o tres barriles entre los dos, mi cubanito lindo sacaba la tortilla de patatas y nos poníamos tibios.
Entonces a mi se me caía un trozo de tortilla dentro del escote de la camiseta hippye descoloria, momento en que el cubano sabrosote se volvía loco de la impresión e inmediatamente se abalanzaba sobre mi, me quitaba la camiseta de un tirón, y me decía - ¡ Quítatel los vaqueros amollll o te los quito yo a bocaos¡¡ Y yo toda húmeda le gritaba -¡Rómpelos mi amolsoteee que total ya están rotos¡.
Y allí encima de la barra del Gambrinus agarrándome a los grifos de cerveza, me hacia suya 28 veces. (para detalles escabrosos diríjanse a leer otros relatos). Al final me encendía un cigarro y mi cubano me decía –Mi amoll ¿cuándo repetiremos esta noche de amoll y pasión?. Y yo medio escocia le decía.
–Ay mi niño pues mañana mismo. Y mi cubano se volvía loco de la alegría por repetir tan pronto

Ese era mi sueño....ahora cuento lo que pasó:

El camarero era moreno eso si, pero de sabrosote no tenia ná. Bueno pelo si que tenia. Y evidentemente nos quedamos los dos solos en el Gambrinus...y allí estaba yo toda nerviosa pensando que mi sueño se iba a hacer realidad. Cuando de pronto viene el cubano, y me dice.
–Cusshaa quilla tu que jases aquí toavia no ves que hemos cerrao?. (¿Seria cubano nacido en Málaga? vaya acento perchelero que tenia)
Y yo que me negaba a que mi sueño se acabará de esa forma tan fría, voy y le digo.

-Anda illo, tomate una caña conmigo, que debes estar cansado. El moreno me mira y dice:
-Me llamo Manolo, y no bebo alcohol. (joee..mi gozo en un pozo).
Y yo le digo ..-Bueno termino y me voy.

Estaba apurandola mientas el muchacho terminaba de recoger las mesas, cuando el susodicho chaval se tropezó a mi lao y me tiró encima la bandeja llena de copas vacías además de los ceniceros y demás porquerías que llevaba en la bandeja. Y ¿dónde fue a parar todo eso? ¿En el escote?...Noooo. (si además yo no tengo escoteee leshes) .¡En toda mi carita morena¡.
Y allí estaba yo, sentada en la barra de un bar con los pelos chorreando, pero de cerveza, escupiendo colillas y con un paquete vacío de chéster entre las tetillas.
Al moreno de mierda le entró un ataque de risa, y me dijo . -¡¡¡Joe tia, que puntería tengo, ni a cosita hecha hubiera metio canasta¡¡¡
Po yo me levante, y me fui pa él como una vaquita brava.
En este momento de la historia entra la censura escrita....piiiii...y so peaso de hijo de la piiiiii, piiiii de piiiiii..y te voy a pegar dos piiiii so piiiiii
Al pobre muchacho le cambio le cara. Me Pidió disculpas. Yo lo volví a mandar a la piiiiii. Me volvió a pedir disculpas como 28 veces más . Y yo lo volví a mandar a la piiii otras 28.
Así, que ya veis...mi erótica fantasía sexual termino con la nariz hinchada de un bandejazo y un paquete de chester arrugao entre las tetas.

Anda, para que digáis que yo no se escribir guarradas eróticas de esas....